La energía eólica ha creado trabajos, energía limpia y sustentable, además de traer beneficios económicos en las zonas rurales, aseguró Steve Cleamer, director e investigador de energías limpias en Estados Unidos.
Un análisis del investigador, publicado en el blog de la Unión de Científicos Preocupados (UCSUSA) demostró que los argumentos de Donald Trump para abandonar el Acuerdo del Cambio Climático de París, hace dos semanas solo es retórica vieja utilizada para enfrentar a la economía con el medio ambiente.
“(El acuerdo) impondría cargas financieras y económicas draconianas en los Estados Unidos”, dijo el presidente estadounidense el 1 de junio pasado.
Al respecto, Cleamer aseguró que los últimos resultados de la industria eólica en aquel país son “impresionantes”.
Datos del Informe anual del mercado de la Asociación Americana de Energía Eólica(AWEA) por sus siglas en inglés, señala que la generación de energía eólica se ha venido duplicando desde 2010, y el año pasado generó 5.5% de la electricidad del país, con lo que se abasteció a 24 millones de hogares.
Para generarla, la industria invirtió 14 mil 100 millones de dólares tan solo en 2016, y 143 mil millones de dólares en la última década; la mayoría de esos recursos llegaron a las zonas rurales donde se ubican los aerogeneradores.
La AWEA estima que siete de cada 10 proyectos se encuentran en los condados más pobres, por lo que el pago de 254 millones de dólares anuales en arrendamientos a los propietarios de las tierras ayudó a activar la economía de estas regiones.
Y como si esto fuera poco, el reporte indica que 88% de la energía eólica generada el año pasado proviene de los estados que votaron por Donald Trump. Y 86% de la capacidad eólica de aquel país se encuentran en los distritos republicanos, es decir, las zonas beneficiadas con el crecimiento de esta industria son precisamente las que estaban de acuerdo con las ideas de Trump.
La industria eólica creó 15 mil nuevos empleos y se prevé que el técnico en energía eólica sea el empleo con mayor crecimiento, sobre todo en Texas, Iowa, Oklahoma, Colorado y Kansas, que tienen entre cinco mil y 22 mil empleados en esta rama industrial.
Por otro lado, también creció la producción de las turbinas eólicas. Las fábricas reportaron que 85% de las partes de los generadores provienen de las plantas ubicadas en el sureste del país.
La fabricación de energía a través del viento aumentó 17% con la apertura de tres nuevas fábricas y la expansión de otras cinco. Ohio es el que concentra la mayoría de las instalaciones (con 60 de ellas), seguido de Texas (40), Illinois (35), Carolina del Norte (27), Michigan, Pennsylvania y Wisconsin (26).
A pesar de lo que diga Trump, la industria seguirá creciendo en la próxima década en Estados Unidos. Para 2020 se estima que se produzcan 59 mil mega watts, lo que a su vez generará 248 mil empleos relacionados con el viento y una inversión de 85 mil millones de dólares en los años siguientes.
Beneficios para todos
Los beneficios de la energía eólica no solo son para industria y sus empleados, también para los ciudadanos. El costo de la energía eólica disminuyó 69% desde 2009, por lo que es más accesible para los consumidores finales.
Pero no sólo eso. El informe del Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley y el Laboratorio Nacional de Energía Renovable reporta que el uso de energías renovables representa menos contaminación ambiental y del agua.
Datos del estudio señalan que las energías renovables, entre las que se encuentra la eólica, reducen 29% la generación de dióxido de azufre, el óxido de nitrógeno y las partículas 2.5, que son las más dañinas para la salud del ser humano.
AWEA estima que proyectos eólicos existentes evitarse casi 159 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) de emisiones en 2016, equivalente a 9% del total de emisiones del sector eléctrico.
Al usar las energías solar y eólica también se ahorra agua, ya que las plantas requieren 18% menos líquido con la sustitución.
Dañará a EU su salida del acuerdo
Los datos revelados por los distintos estudios elaborados por las agencias científicas estadounidenses, demostraron que es erróneo que el país no obtenga beneficios con las energías limpias, en este caso en particular con la energía eólica.
Sin embargo, las políticas de Donald Trump sobre cambio climático podrían dejar atrás a la nación, que hasta el momento se había considerado el líder en el combate al cambio climático.
Si bien el mercado y los ciudadanos seguirán trabajando en el desarrollo de energías limpias, China e India también están haciendo inversiones importantes en este sector para reducir sus emisiones, como lo mandata el Acuerdo de París.
Esto podría poner en riesgo el liderato de Estados Unidos en la carrera mundial para producir energías limpias, por lo que se necesitan políticas y guías como el Acuerdo para no perder esta posición, dice el investigador Steven Cleamer.
“Nuestro país será más fuerte para él, no más débil”, concluye el especialista.
Deja un comentario