La compañía sueca de autos de lujo ha anunciado su entrada al emergente mercado de los autos eléctricos, y lo hará con una firma nueva que se desprende de sí misma: Polestar.
Las dos firmas tienen, no obstante, una larga historia de colaboración: desde 1996 habían trabajado codo a codo en el segmento de automovilismo deportivo; y en 2015, Volvo Cars adquirió el 100 por ciento de Polestar.
Los planes de la sueca son que Polestar se independice totalmente de Volvo y funcione como una firma autónoma: los nuevos automóviles ya no llevarán el logo de la primera, sino de Polestar.
Sin embargo, la relación entre las dos firmas seguirá siendo estrecha: la ingeniería aplicable tanto a los autos de lujo de la sueca, como a la de alto desempeño de la filial, será compartida en los modelos de ambas compañías.
Håkan Samuelsson, presidente y CEO de Volvo, al respecto del movimiento, dijo: “Polestar será un nuevo competidor en el emergente mercado de los autos eléctricos; queremos que compita contra los más grandes del mercado. A través de esta nueva firma pretendemos ofrecer al mundo un nuevo nivel de desempeño en autos impulsados por electricidad”.
La sinergia entre ambas compañías
En orden de adoptar mejores prácticas de competencia, la compañía de autos de lujo aclaró en su comunicado que mantendrán una sinergia de trabajo que les permitirá sacar provecho tanto económico como estratégico: la conexión que gozará Polestar con Volvo permitirá una penetración rápida a los mercados.
Además, esta sinergia permitirá a ambas firmas el desarrollo de autos eléctricos de alta gama y desempeño.
La opinión de los expertos es que este movimiento puede ser indicador de que Volvo pretende competir contra Tesla, o incluso Rimac: las firmas de autos eléctricos de lujo y alto desempeño por excelencia.
Los nombramientos
Para reafirmar el compromiso de establecer una clara diferencia entre las compañías, Samuelsson nombró nuevas cabezas ejecutivas para ambas.
El vicepresidente senior de diseño de Volvo, Thomas Ingenlath, será el nuevo presidente y CEO de Polestar. Mientras que el vicepresidente corporativo de comunicación en Volvo, Jonathan Goodman, se unirá al primero como director de operaciones.
Jonathan Goodman, director de operaciones de Polestar; Thomas Ingenlath, CEO de Polestar.
“Con 25 años de experiencia comercial en la industria automotriz, Jonathan Goodman es el hombre ideal para complementar la visión de Thomas Ingenlath; la experiencia operacional del primero, y la experiencia en la toma de decisiones del segundo, harán de Polestar una compañía sólida”, dijo Samuelsson.
A este respecto, Ingenlath dijo: “estoy muy emocionado por este nuevo reto: establecer y consolidar una nueva marca; desarrollar un portafolio sólido que refleje la pasión de todo el equipo de Polestar será mi primera tarea”.
El calendario está puesto para que Polestar, en otoño, haga anuncios oficiales sobre su oferta, su entrada al mercado, y otros planes comerciales.
Finalmente, el presidente de Volvo anunció a los nuevos directivos que tomarán el lugar que dejaron vacío Goodman e Ingenlath: se trata de Robin Page, que será el nuevo vicepresidente de diseño, y de David Ibison será el nuevo vicepresidente corporativo de comunicación.
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