Los automóviles eléctricos han potenciado nuevos nichos de mercado muy específicos: desde la innovación en baterías, manufactura, hasta la infraestructura de carga y estaciones de reparación. Las viejas petroleras son conscientes de estos nuevos segmentos, y desde que la entrada de los EV’s se hizo lo bastante evidente, han buscado adaptarse; Shell, en este sentido, da un primer paso con el anuncio de que sus nuevas estaciones de servicio contarán con cargadores eléctricos.
Desde el año pasado la petrolera había anunciado que comenzaría el desarrollo de este proyecto, para Inglaterra y Países Bajos, a finales de este año; pero no fue hasta ayer que se formalizó la iniciativa, de la mano de la operadora de redes de carga Allego.
Ésta, a través de su comunicado, dijo: “estaremos trabajando en conjunto con Shell para instalar cargadores eléctricos en sus estaciones de servicio. El proyecto está considerado para los sitios en Inglaterra y Holanda. El objetivo es que para finales de este año las primeras redes de carga ya estén instaladas en las estaciones de Shell”.
Anja Van Niersen, CEO de Allego, por otro lado, dijo: “estamos muy contentos de habernos asociado con Shell, creemos que con el acuerdo podemos contribuir a la transición energética y lograr una movilidad sustentable y limpia. Queremos ofrecer a los clientes de Shell un excelente valor agregado”.
Y es que Allego ha estado monitoreando con mucha atención el desarrollo del mercado de los vehículos eléctricos, en palabras de Van Niersen: “los usuarios ya están listos y dispuestos para saltar a la movilidad eléctrica, pero carecen de una infraestructura de carga lo suficientemente robusta, y de servicios interoperables: esos son al menos sus principales preocupaciones. Allego y Shell han unido fuerzas para ofrecer ese servicio: añadir cargadores rápidos a sus estaciones y así contribuir tanto a la transición energética, como a la creación de una red robusta y eficiente de carga eléctrica”.
Esta operación se alinea con las conocidas estrategias de Tesla y Porsche para la expansión de redes de carga. De forma muy interesante, Shell ha confirmado que las redes que instalará en sus estaciones serán de 50 kilowatts (KW), lo que puede parecer desafortunado, si consideramos que la red de carga de nueva generación, aquella con potencia de hasta 150 KW –incluso 350 KW–, está a punto de entrar, precisamente a manos de las dos firmas antes mencionadas.
No obstante la red que instalará Shell servirá perfectamente para, por ejemplo, el Nissan Leaf, el BMW i3, y todos aquellos vehículos que sean compatibles con el conector CCS; incluso los conductores de algún modelo Tesla podrían usar la red, con el adaptador correspondiente.
Aunque Shell no reveló la cantidad de estaciones que se abrirán, dejó claro que serán específicamente en las zonas del Gran Londres, y la parte oeste de los Países Bajos. Si se consideran las 25,000 estaciones de servicio a nombre de Shell alrededor del mundo, esta nueva intervención podría ser el primer paso de un aumento muy significativo en la infraestructura de carga para el futuro.
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