Los mercados internacionales han recibido la entrada de los vehículos eléctricos con gran celebración: países como Alemania, Noruega, y Estados Unidos mantienen políticas de compra que ofrecen a los usuarios incentivos, o deducibles, para una adopción más rápida: Corea del Sur también había implementado una política similar, pero con una restricción muy seria, calificada a veces como ridícula.
El plan del país asiático contemplaba un deducible de hasta $22 millones de won, que equivale a USD$18,000 aproximadamente; sin embargo, la medida sólo era aplicable para aquellos vehículos que pudieran cargar su batería en menos de diez horas, con un voltaje estándar de 220 volts. Esto, desde luego, descalificaba a los vehículos más grandes, con baterías más complejas y mayor autonomía, incluidos los vehículos de Tesla.
La medida, evidentemente, estaba hecha para favorecer especialmente a las marcas nacionales Surcoreanas, Hyundai y KIA, que en el caso de la primera estaba introduciendo su vehículo eléctrico IONIQ; y fue satisfactoria, sólo en el mes de diciembre de 2016 Hyundai logró vender 1000 unidades de su vehículo, que correspondieron a casi un cuarto de las ventas totales de este tipo de autos en todo el año.
En su momento, se anunció que Nicolas Villeger, vicepresidente de Tesla, estaba trabajando muy de cerca con el gobierno surcoreano para abolir la medida. Y es que Sur Corea es uno de los mercados más poderosos de este segmento: el onceavo más poderoso del planeta, razón por cual permanecía con gran importancia en los planes de la firma americana.
Ya en agosto del año pasado, cuando Tesla abrió las órdenes de venta en aquel país de su Model S y Model X, se confirmó que los clientes surcoreanos estaban mostrando gran interés, en particular en el Model 3. Entonces, Tesla confirmó que había logrado una asociación con Shinsegae, la cadena de tiendas más grande del país, para abrir estaciones de carga en sus tiendas. El permiso oficial se obtuvo en febrero de este año, y la estación de carga abrió oficialmente en marzo.
Hoy, los medios oficiales de Sur Corea han anunciado que el Ministro de Medio Ambiente ha anunciado la abolición de la llamada “medida de las diez horas de carga”, volviendo los automóviles de Tesla elegibles para el subsidio, y por ello otorgándoles un atractivo mayor para los clientes.
El gobierno surcoreano, en su lugar, instauró una nueva medida más generosa que contempla redes de carga rápida de nivel dos, que corresponden a 32 y hasta 100 amperes de corriente directa; favoreciendo de forma más horizontal a los autos y redes de carga de mayor potencia. La nueva regla no entrará en efectos hasta septiembre, lo que podría retrasar las ventas de Tesla en el mes de Agosto.
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