Hakan Samuelsson, presidente y CEO de Volvo Car Group, se ha expresado en una entrevista dada al periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung (FAZ), indicando que “Tesla se las ha arreglado para ofrecer un auto por el que las personas hacen fila”. También ha dado indicios de que la famosa marca de automóviles sueca cambiará el rumbo de su producción, para reemplazar los automóviles con motores diésel por flotas eléctricas e híbridas.
La actual generación de motores diésel de Volvo –que dejará de producirse en 2023– será la última, ya que el costo financiero de un rediseño para cumplir con las exigentes regulaciones de la Unión Europea sería demasiado alto. “El mercado de hoy no muestra razón alguna para seguir invirtiendo en diésel”, dijo Samuelsson. Según las normas europeas, los fabricantes de autos deberán limitarse a un promedio de 95 gramos de dióxido de carbono por kilómetro para 2020, lo que significa que deberán desarrollar motores más eficientes. Según Samuelsson, estas medidas provocarán un aumento en el precio de los vehículos con motor diésel hasta el punto en que los híbridos se convertirán en una alternativa atractiva.
En este escenario, Volvo ya ha confirmado una fecha para el lanzamiento de su primer auto totalmente eléctrico, que llegará al mercado en 2019. Se apuntará a un modelo de alta calidad y diseño atractivo, por un costo que rondará los 35 000 a 40 000 dólares, que competirá con el vehículo Tesla Model 3.
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