VW en conjunto con JAC construirá 100,000 vehículos totalmente eléctricos por año en China
Debido al aumento en la contaminación atmosférica, China se siente cada vez más presionada para controlar la emisión de gases en su extenso y superpoblado territorio.
Como esta presión se hace más acuciante, debido al mandato del proyecto ZEV, que se ha tornado materia prioritaria, China se está planteando como meta, que el 8% de sus vehículos nuevos deben ser eléctricos para el año 2018, y para el 2020, el 12% de sus automóviles circulantes.
Las empresas automotrices chinas no están aún preparadas para lograr este tipo de fabricación, pues en general, sus diseños son copias sin licencia de modelos japoneses o europeos, que la mayoría de las veces no alcanzan un nivel lo suficientemente atractivo para atraer a compradores exigentes, ni exploran los modelos eléctricos de manera suficiente ni rentable.
Entonces, la clave para alcanzar esta meta está en asociarse con alguna empresa extranjera conocedora del medio y eficiente fabricante de eléctricos, como para poder apoyar al gobierno en su cometido de ventas de modelos de automóviles electrificados.
Cómo vender automóviles extranjeros en China
Para poder realizar la venta de vehículos extranjeros en China se puede hacer a través de dos caminos: importarlos (gravados con impuestos muy onerosos) o fabricarlos de manera local, siempre y cuando se asocie con un fabricante local, con una inversión máxima de 50% de capital extranjero.
Si bien la Volkswagen no es nueva en el mercado chino, ya que producía y vendía por medio de empresas mixtas del grupo VW con dos fabricantes estatales: una, la llamada Shangai Volswagen, fruto de su alianza con la Corporación Industrial Automovilística de Shanghái y la FAW-Volswagen, con la empresa FAW.
De hecho, la VW se sitúa como el mayor fabricante extranjero de automóviles en China, en el que está empeñado en comercializar vehículos eléctricos o híbridos, alianza clave con JAC, para cumplir con el objetivo impuesto por el ZEV para el 2020.
Sumado al hecho que la estructura social china se está modificando de manera acelerada, llegando a la clase media a un aumento importante en número y alcanzando, paralelamente, un gran poder adquisitivo asociado, que transforma al mercado chino en un muy apetecible objetivo comercial.
La alianza comercial VW-JAC
El fabricante de automóviles alemán Volkswagen, dentro de su estrategia para convertirse en líder y sinónimo de electrificación en el mundo, recibió la luz verde del gobierno de China para la realización de una alianza con la empresa fabricante local Anhui Jianghuai Automobile Group (JAC Motors).
JAC , por su parte, es un fabricante chino, cuya producción se basa en vehículos de mayor envergadura, como son camiones pesados, medianos y ligeros, así como vehículos de uso industrial, berlinas, autobuses, todoterrenos y algunos componentes puntuales como cajas de cambio, motores y chasis.
Estos vehículos serán destinados a mercados domésticos e internacionales, siendo vendidos bajo una nueva marca, de conjunta creación, los cuales serán fabricados en la factoría que JAC tienen en la ciudad de Hefei.
Esta alianza empresarial fue autorizada por La Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma (CNDR), que es el órgano estatal de planificación de mayor jerarquía del país, cuya meta es construir los 100,000 vehículos, por un monto de USD $740 millones.
Este proyecto, si bien no tiene fecha certera de comienzo, deberá iniciar muy pronto, pues China siente sobre sus hombros el peso que le impone el mandato prioritario para la emisión de cero de gases contaminantes.
China es mercado automotriz potencial más importante del mundo, con el que cualquier empresa estaría dichosa en firmar un contrato multimillonario, considerando que vende unos 20 millones de automóviles nuevos por año.
En todo caso, el gobierno chino está interesado en los automóviles 100% eléctricos puros, más que en los híbridos plug-in o enchufables, lo que ha causado preocupación en otros empresarios alemanes, cuya especialidad es más bien la construcción de híbridos, lo que les estaría restando competitividad en el mercado del gigante asiático.
Así que VW corre con ventajas comparativas bastante grandes en relación a sus compatriotas competidores, y las piensa aprovechar de todas maneras, ya que este año apunta a invertir más de 5,000 millones de dólares en China, por medio de sus empresas de capital conjunto.
Un mercado muy propicio para esta empresa alemana, que está cimentando cada día más sus bases en este propicio mercado, muy numeroso, activo, y con gran poder de compra, que además está deseoso de la novedad. y de hacer uso de su cada vez más creciente poder adquisitivo.